El pasado viernes 20 de mayo, de 10 a 11 de la mañana, se expuso la vida y obra del ilustre escultor y pintor venezolano, Francisco Narváez, en las instalaciones de la Casa de Estudio de la Historia de Venezuela Lorenzo A. Mendoza Quintero. El evento fue conducido por la curadora de la institución y Licenciada en Artes Plásticas, Roselia Level.
En primer lugar, Level habló ampliamente sobre los primeros pasos de Narváez en la pintura y la escultura: nació en Porlamar el 4 de octubre de 1905, isla de Margarita, y siendo aún adolescente se trasladó a Caracas para estudiar en la Escuela de Bellas Artes. Posteriormente, viajó a París para acudir a la Academia Julián, en donde sería sumamente influenciado por los movimientos y estilos artísticos de la Europa de esos tiempos. Además, Roselia Level recalcó el marcado componente étnico que caracteriza la obra de Narváez, así como el lenguaje cargado de reminiscencias indígenas y los volúmenes con la voluptuosidad del trópico.
Posteriormente, la oradora pasó a proyectar, a través de diapositivas, diversas imágenes de obras de Francisco Narváez como “La patria” (1943), “Las toninas” (1943), “La educación” (1950), “La ciencia” (1950), “El atleta” (1951) “La figura acéfala” (1966), “La ronda” (1967) y “Virgen de Coromoto” (1969). Igualmente, destacó la labor de Narváez con personajes como Carlos Raúl Villanueva y Richard Boulton.
Asimismo, Level hizo referencia al Premio Nacional de Pintura obtenido por Narváez en 1948 y a su nombramiento, en 1953, como Director de la Escuela de Artes Pláticas y Aplicadas de Caracas. Además, destacó la inauguración, en 1979, del Museo de Arte Contemporáneo Francisco Narváez de Porlamar.
Finalmente, Roselia Level relató la creación de la Fundación Francisco Narváez (1986), posterior a la muerte del artista en el año 1982. Es una institución de carácter privado, sin fines de lucro, presidida por la hija del escultor venezolano, Margarita Narváez. Esta fundación se encarga de la investigación, registro y divulgación de la obra de Francisco Narváez, así como también de la restauración, mantenimiento y vigencia de los trabajos del escultor venezolano a través de proyectos de conservación integrales del arte público.
El evento contó con poca afluencia de público (alrededor de 15 personas), en su mayoría de la tercera edad, y el personal de protocolo de la Fundación Empresas Polar ofreció una variedad de refrigerios a los oyentes una vez finalizada la actividad cultural.
Anthony Abellás
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